Mensajes

Juntos, recordaremos y celebraremos la vida de Agustín, compartiendo nuestros recuerdos, pensamientos y condolencias. Que este espacio sea un refugio de amor y esperanza para todos nosotros mientras recorramos por este camino de duelo y recuerdos.

Hermano, si pudiéramos retroceder el tiempo te diríamos tantas cosas, té abrazaríamos tan fuerte como fuera posible, al recordarte sentimos nostalgia, tristeza como también  las enseñanzas que dejaste con tu ausencia.

Te fuiste de este mundo sin decir adiós, dejando un vacío inmenso en el corazón de quienes te amamos. Hoy sé que el cielo es tu morada eterna y que estas feliz en un lugar hermoso,  en el cielo.

No hay palabras para describir como familia lo que sentimos con tu partida y el que ya no estés físicamente con nosotros, dejaste con tu partida muchos corazones heridos, sangrando de dolor y de sentimientos.

 Como te extrañamos en nuestras reuniones familiares, cuando siempre iniciabas nuestras tantas conversaciones, y escuchar a nuestra madre  llamarte Aguuu ,ahora todo eso está guardado en lo más profundo de nuestros corazones, los momentos preciosos que compartimos, cada risa, cada abrazo quedaran grabados en la memoria.

Descansa en paz, querido hermano siempre estarás en nuestros corazones y pensamientos, hasta que nos volvamos a encontrar.

Me llena de nostalgia al recordar a nuestro tío, fue el que me dio mis primeras enseñanzas sobre el ajedrez y andar en bicicleta, como olvidar los debates de domingo en donde generaba instancias de dialogo, discusión y reflexión sobre  temas de contingencia, siempre acompañado de la palabra de Dios.

Siempre permanecerá en nuestros corazones, por ahora nos quedan los mejores sentimientos de los momentos compartidos en vida.

La palabra de Dios dice: “oí una voz del cielo me decía bienaventurados los que de ahora  en adelante  mueren en el señor. Sí, dice el espíritu, ellos descansaran de sus fatigadas tareas, pues sus obras los acompañaran.”

Habría mucho que decir de nuestro hermano Agustín ya no estarán físicamente con nosotros, pero dice su palabra que todo lo que hacemos en vida, sean obras buenas o malas tienen un eco en la eternidad, no se olvidan. Hoy no lo veremos más, pero hay muchas de sus obras que estarán en nuestra memoria y en forma tangible, tantas construcciones realizadas con sus manos   quedan para recordarlo.

A veces en la vida dios  nos da la dicha y la honra de poder tener relaciones de amistad y compañerismo. Pero hay algunas que lo marcan por toda la vida, porque la amistad no es cualquier cosas, conlleva compromiso,  lealtad, dejar muchas veces sus propias necesidad por nuestro amigos, pero Agustín era un ejemplo de alguien con un gran compromiso, Dios le dió ese talento tan grande, tan inteligente, cuando uno le entregaba un desafío él rápidamente  lo recreaba en su mente y sabia como resolverlo. Todo para él era sencillo, lo conocí y agradezco haber gozado de su amistad. Dios le ha premiado con la vida eterna  y nos veremos allá.

Podrían decir muchas cosas de Agustín o como le decía Agustincito. Como dice la palabra de Dios: “Jehová lo dio y Jehová lo quito”. Desde que conocí a mi hermano Agustín nació una amistad muy hermosa tuve la bendición de conocer y compartir con él muchas veces. Nunca voy a olvidar cuando trabajaba apasionadamente,  me ayudo a construir muchas cosas, sus obras eran espectaculares, la última vez que lo vi estaba muy contento porque estaba acompañando a su padre en el campo y se sentía feliz por ello. Mi amigo ha partido, el señor  ha decidido llevárselo y él sabrá curar las heridas porque Tenemos la esperanza de la vida eterna.

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